Civilización egipcia. El Imperio Nuevo

El Imperio Nuevo.
Dinastías XVIII - XX. 1570 - 1197

Lo podemos dividir en dos etapas

• el período de la XIX dinastía, cuando se crea un imperio que rebasa las fronteras hasta entonces inmutables de Egipto
• período entre las dinastías XIX y XX, cuando Egipto hace frente a la dislocación del imperio primero con cierto éxito, para terminar más tarde, en el desastre.

La serie de faraones caudillos que va desde Amenonfis I )1570 - 1545) hasta Tumosis III (1490 - 1436), convierte a Egipto en menos de un siglo, en la primera potencia del oriente medio.

¿Porqué Egipto emprendió este camino?

• Quizás por motivos defensivos, para que no se repitiera la humillación de los hicsos. Por ejemplo, el primer acto de la nueva política imperial fue la conquista de Palestina, lugar que había sido el punto de patida de los hicsos.
• Razones económicas: asegurarse el abastecimiento de materias primas

Consecuencias:
No lograron imponerse como imperio sobre los pueblos sometidos, haciéndoles partícipes de su cultura
Originó una clase militar no sñlo compuesta de egipcios sino preponderantemente de mercenarios y esclavos extranjeros
aparición de la esclavitud en gran escala: los hombres para trabajar en las minas, canteras y grandes construcciones; las mujeres para trabajar en el servicio doméstico, cantantes y bailarinas
extensión e intensificación del tráfico económico
Desarrollo del lujo
El templo se transforma en una potencia económica capaz de desafiar al palacio.

Problemas religiosos:
Dentro del politeísmo egipcio había existido desde siempre una tendencia a dar mayor relevancia a determinados dioses: Horus y Re en el período originario y en el Imperio
antiguo, Month y Amón desde la XII y especialmente desde la XVIII dinastía. Pero es Amón sobre todo, quien bajo la dirección de los sacerdotes de su templo de Tebas, tiende a adquirir preeminencia, viniendo a convertirse en una especie de Dios del Imperio, cuyo estandarte se lleva en las batallas y cuyas òrdenes sigue el faraón.
Los faraones se sienten obligados a aumentar el esplendor del templo de Amon, al que va a parar una buena parte de los botines de guerra, convirtiéndolo así, en una gran potencia económica. Pero la influencia del templ tebano se extiende también a la política.
En este período Amenofis IV llevará adelante un gran movimiento religioso. consitió en la sustitución de Amon y de los demás dioses por ATON, el sol, el disco solar que se eleva como única fuerza creadora de todo el universo y de todo lo existente.
El único hijo físico, profeta e intérprete de ATON en la tierra es el faraón, llamado "el buen dios", de manera que mientras éste y su familia adoran a Aton y están en relación inmediata con él, en cambio, el resto de los mortales adora al faraón  en cuanto dios.
La nueva religión fue acompañada de la proscripción de todos los demás dioses, de la destrucción física de sus nombres (sobre todo el de Amon) y de sus estatuas, y de la expropiación de sus templos a favor de la nueva divinidad.
El fundador de la nueva religión AMENOFIS IV (literalmente Amon está contento) cambió su nombre po el de EKNATON (el que agrada a Aton).

Quizás las reforma de Eknaton fue un intento de rectificar la actitud de una Egipto encerrada en sí misma en su relación con los pueblos sometidos.
Todos los pueblos veneraban al sol.
Bajo este supuesto, una deidad solar que excluyera a todos los demás dioses o simplemente tolerara a algunos podía servir como integradora de los diferentes pueblos del Imperio Nuevo. Es decir, la sustitución de Amon, un dios "nacional", por así decirlo,  por ATON, un "dios universal", común a todos los pueblos, y encarnado por el faraón.

Este cambio sí zanja la oposición entre la realeza y el sacerdocio, al aniquilar el poder político y económico de los sacerdotes de Amon, y realzar el poder del faraón.

Nada tiene de extraño que su reforma apenas lo sobreviviera a su muerte.